Casita Bristol: sala de música/escritorio

¡Por fin! Ya he terminado la decoración de suelo, paredes y techo de la sala de música/escritorio de la casita Bristol.

Aquí la muestra.

El techo es pintado, con un tono asalmonado. Las paredes están forradas con papel plastificado azulado, puesto que quiero darle un toque marinero a la sala; lo malo es que me han quedado algunas arrugas en el la pared del fondo (esquina derecha) y la pared de la izquierda (tocando la escalera) -por suerte en el rincón del fondo a la derecha pondré una estantería y al lado de la baranda de la escalera pondré el escritorio y quedará tapado. Aixxx que lástima, pero lo puedo disimular con la idea que he comentado.

¡El suelo me encanta como ha quedado!, es lo que más trabajo me ha costado. Está hecho con corcho, que tenía unos trozos en lámina (que guardé de la pared que tenían mis padres forrada con corcho jeejjeje para que veáis como sirve guardar cositas, nunca sabes cuando te pueden ir bien jejeje). Pues los corté a modo de azulejos y los pegué con silicona líquida, dejando un espacio entre ellos. Lo dejé secar bien, luego lo barnicé, pero del líquido algunos azulejos se levantaron sus esquinas y tuve que volver a pegar algunas partes y dejar secar de nuevo. Después lo lijé todo para que quedara bien uniforme y lo volví a barnizar.
Seguidamente, rellené los espacios de entre los azulejos con masilla que teñí con pintura marrón. Le tuve que dar dos veces el relleno porque se secaba y quedaba hueco. Cuando estuvo bien seco volví a lijar bien todo para dejarlo lo más liso posible.
Y finalmente lo barnicé con barniz cerámico y aquí el resultado después de tanto esfuerzo.

Y en esta vista se puede ver la zona de acceso a la habitación de al lado, que es la de los niños.

¡Así, pues, ahora a decorar con los muebles y accesorios que es la parte que más me gusta!

Ya os mostraré como queda.