Un nuevo miembro: Nuck

El 16 de diciembre de 2010 un nuevo miembro de la família entró, Nuck.
Lo adoptamos de la Lliga Protectora d'Animals de Sabadell, era un cachorro de unos 7 meses.
Era precioso, cuando lo ví, me enamoré de él. Me llamó su atención por su color de pelo (que era blanco y destacaba en medio de los demás cachorros marrones i negros), además por su tranquilidad (que todos ladraban al verme, menos él que estaba sentado -bien firme- todo tranquilo); y el último toque fue cuando ví que era tipo golden retriever (siempre me ha encantado esta raza, pero yo no me lo quería comprar, yo quería que fuera adoptado de una protectora, de la protectora en la que yo llevo tantos años haciendo de voluntaria, y en la que con más de 12 años que llevo nunca había entrado uno como éste; por lo que este lo quería adoptar yo).

Por lo que animo a los amantes de los animales que deseen adquirir un perro u gato que se dirijan a una protectora. Os paso la web de la de donde yo adopté por si a alguién le interesa:

www.protectorasabadell.org        ¡En su web podreis consultar los animales que tienen para adoptar!

Una vez hechos los pertinentes tràmites de adopción nos lo llevamos finalmente a casa, mi pareja -Pere- y yo. La verdad que se portó muy bien en el coche, no le tenía medio. Me gustó, pués con Duna -la otra perrita que tenemos- le encanta ir en coche y además que hacemos muchos viajes y excursiones y era un punto bueno.

En su llegada a casa, nada más entrar por la puerta se topó con Duna, que por lo visto se sorprendió mucho de su llegada. Tubieron un pequeño encontronazo, pues se dijeron de todo en tan solo 10 minutos, no pararon de ladrarse. Pere y yo nos mantuvimos al margen, controlando por eso la situación. Entendimos que estaban marcando el terreno, cada uno por su lado y por sus intereses. Pero en esos minutos todo quedó claro: la que mandaba en casa era Duna. jejeje A partir de ahí ya no hubo más problemas.

Nuck pudo oler toda la casa, ver las diferentes habitaciones, comedor, cocina, baño... Mientras Duna estaba a la expectativa. Los primeros días Duna no le dejaba los juguetes -todos eran para ella debía pensar-, tampoco lo guestaba que Nuck le rozara, se tumbara a su lado o se apoyara en ella. Se mostraba muy arisca y poco maternal en ese sentido. A la hora de comer por eso, no había problemas, cada uno en su plato (eso sí, al acabar se intercambiaban el plato no fuera el caso que el otro se hubiera dejado algo jejeje).

A la hora del paseo bastante bien, no tiraba demasiado y al corregir un poco con la correa ya se acercaba de nuevo a nosotros. Al principio, los primeros 5-6 días era un poco miedoso al salir a la calle: tenía miedo de las papeleras, de una bolsa que se movía por el viento, de una moto aparcada... y también si en casa subíamos un poco el tono de voz (sin dirigirnos a él) también se iba a su camita como un cohete. Pero poco a poco, como buenos guías le enseñábamos que no debía tener miedo, que explorara y se acercara para que viera que no debía tener miedo, además nosotros nos mostrabamos tranquilos, al igual que Duna. En ella se fijaba un montón, si ella estaba tranquila, él estaba tranquilo. En eso, lo ayudó mucho.

Por lo que refiere a los pipís y cacas, enseguida aprendió que en casa no debía hacérselo. Eso fué la primera semanita que algunos se le escapaban o bien no aguantaba del todo. Pero en poco tiempo aprendió.

En cuanto a responder a su nombre también lo entendió en menos de una semana, por lo que enseguida lo pudimos soltar al parque para que corriera y jugara libre. Lo que si que es un poco un "perrito aventurero", como el de la película. Que quiere oler, observar, curiosear... y va andando sin parar y luego se pierde si uno no está al caso. De momento no ha sucedido jejeje También tenemos a Duna que lo controla como se vaya muy lejos.

Y por lo que refiere a sociabilizarse pues muy bien: le encanta estar con perros y jugar, así como que se le acerquen niños y adultos para decirle cosas y acariciarlo.


Os seguiré contando próximamente más cositas de Nuck.